Lo impensable está de moda. Ya lo vimos el verano pasado cuando bolsos, pulseras y relojes se volvieron transparentes pero, este es el momento de los gatos, en concreto, de sus orejas.
Eso de llevar orejitas de gato era cosa de Halloween, Carnaval o cualquier otro evento en el que se requiriese disfraz; todo muy lejos del día a día y de los looks para ir a trabajar o salir a cenar.
Sin embargo, el 2014 va a ser el año de las orejas de gato. No se trata de una tendencia defendida por unos pocos sino que es una moda asentada y extendida.
El gran precursor fue Givenchy cuando las sacó en su desfile de otoño de 2011.
Fue entonces cuando empezó a verse en los outfits de bloggers y otros fashionistas.
Temporada a temporada ha ido adquiriendo más fuerza pero el momento clave se dio con el estreno del videoclip ‘22’ de Taylor Swift, en el que aparece con una diadema de orejas de gato en strass.
¡Ay mis queridas diademas! Para mí son un complemento básico, desde hace muchos forman parte de día a día y aunque he de reconocer que las tengo un poco olvidadas, las sigo adorando y ahora con estas simpáticas orejas, aún más.
Hace unos años me habría mostrado bastante reticente a salir a la calle, un día normal, con orejas de gatito pero la verdad es que, ahora, es muy probable que me anime con una diadema sencilla.
Las orejas de gato no entiende de estilos por eso, se pueden ver grandes y llamativas, pequeñas y discretas, divertidas, formales, de strass, lana, fieltro, etc.
¿La manera de combinarlas? Cualquiera en la que sean las únicas protagonistas; se merecen todas las miradas y, para no rozar el límite del “horterismo”, no hay que olvidarse nunca del “menos es más”.
Os dejo algunos cat hats de Asos y diferentes maneras de llevarlo, las imágenes son de Chicisimo.
Besos!
A mi me parece muy original, me encanta
ResponderEliminarSNB: Sexy, Naughty, Bitchy me
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